Yo detesto el portuñol. Ya la palabra portuñol es horrible. Me gustaría leer a los visitantes del blog, que quieran contar qué detestan. Que esta entrada sea la oportunidad para dejar al cielo de testigo de las cosas que aborrecen.
La "corrección" y "perfeccion" en la expresión hablada de los ejecutivos jovenes, esa gente que habla de una forma en la oficina y de otra forma en la calle, unos carechimbas que no saben hablar y cuando estan en "modo trabajo" empiezan a hablar de cierta manera que me emputa.
Detesto que la ropa haga parte del desempeño profesional, que vestirse bien lo haga a uno mejor o peor trabajador. Detesto que en las empresas grandes de Antioquia los trabajadores profesionales sean todos igualitos, como si fueran un hijueputa club, detesto que varios de mis buenos amigos de la infancia ahora comen y hablan torciendo la boca con elegancia, vida carechimba, torcer la boca no es un valor. Yo se que es mi vano afan de originalidad, pero eso me emputa.
2. tr. Aborrecer
ResponderEliminaraborrecer
2. tr. Dicho de algunos animales, y especialmente de las aves: Dejar o abandonar el nido, los huevos o las crías.
Fíjate lo interesante: del latin detestāri
ResponderEliminarSerá por eso que muchos detestan crecer y abandonar la casa paterna?
ResponderEliminarYo detesto el portuñol. Ya la palabra portuñol es horrible. Me gustaría leer a los visitantes del blog, que quieran contar qué detestan. Que esta entrada sea la oportunidad para dejar al cielo de testigo de las cosas que aborrecen.
ResponderEliminarLa "corrección" y "perfeccion" en la expresión hablada de los ejecutivos jovenes, esa gente que habla de una forma en la oficina y de otra forma en la calle, unos carechimbas que no saben hablar y cuando estan en "modo trabajo" empiezan a hablar de cierta manera que me emputa.
ResponderEliminarDetesto que la ropa haga parte del desempeño profesional, que vestirse bien lo haga a uno mejor o peor trabajador. Detesto que en las empresas grandes de Antioquia los trabajadores profesionales sean todos igualitos, como si fueran un hijueputa club, detesto que varios de mis buenos amigos de la infancia ahora comen y hablan torciendo la boca con elegancia, vida carechimba, torcer la boca no es un valor. Yo se que es mi vano afan de originalidad, pero eso me emputa.
Yo detesto los trabajos con horario extendido. Y los reclamos. Y esperar. Y ser impaciente. Y las carreras contra reloj.
ResponderEliminarC.